Título Original: 12 Years a Slave
Año: 2013
Director: Steve McQueen
Reparto:
- Chiwetel Ejiofor como Solomon Northup
- Benedict Cumberbatch como Ford
- Michael Fassbender como Edwin Epps
- Sarah Paulson como Mistress Epps
- Lupita Nyong'o como Patsey
Argumento: Basada en un hecho real ocurrido en 1850, narra la historia de Solomon Northup, un culto músico negro que vivía con su familia en Nueva York. Tras tomar una copa con dos hombres, Solomon descubre que ha sido drogado y secuestrado para ser vendido como esclavo en una plantación de Louisiana. Solomon contempla cómo todos a su alrededor sucumben a la violencia y a la desesperación. Pero él decide no rendirse y esperar a que llegue el momento oportuno para recuperar la libertad y volver con su familia.(Filmaffinity)
Acabo de ver 12 años de esclavitud y me siento rota por dentro. Creo que es exactamente este sentimiento el que me ha hecho evitar La lista de Schindler durante todo este tiempo. Me encantan las películas que me hacen pensar, lo reconozco, ese estilo de realidad dramatizada que te hace dudar entre si te lo están haciendo más duro de lo que es o te lo están dulcificando, pero no todos los días puedo ver películas así. Cuando digo que no voy al cine a ver la realidad es porque soy muy sensible a esa realidad cinematográfica que muestra como de asqueroso puede llegar a ser todo (y porque muchas veces es un coñazo ver la realidad). Hoy no estaba de humor para ver esta película, pero lo hice de todas maneras, y ahora quiero echarme a llorar. Así, sin más, lo reconozco.
12 años de esclavitud tiene muchos puntos fuertes. Tiene una historia poderosa y mucho más reciente de lo que nos gusta admitir, como norma general. Pero no penseís ni por un momento que tiene acción o que es movida y rápida, porque no lo es en absoluto. La película cuenta la historia de un hombre, Solomon (Chiwetel Ejiofor) que pasó de ser un hombre libre con derechos (dentro de lo que cabe), un trabajo, una familia y una casa, a ser un esclavo por fiarse de la gente que no debía. Durante el metraje te cuentan lo que le pasó a este hombre durante los 12 años que fue un esclavo. Te cuentan por todas las manos por las que pasó como si fuese un trozo de carne y como tuvo que pelear con todo, hasta consigo mismo, para poder sobrevivir. Una de las frases que me parece más poderosa de toda la película es una que dice al principio y que es algo así como: "Yo no quiero sobrevivir, quiero vivir". Esta frase célebre engloba un poco el espíritu del argumento de la película mientras te muestra la crueldad y la dureza con las que la gente negra vivía en la época en la que se desarrolla. Este tipo de película siempre me recuerda lo asqueroso que puede ser el mundo y como el poder, o la búsqueda de él, puede pudrir a las personas, porque tengo la sensación de que siempre fue un tema de demostrar quién era más poderoso que los demás o quién se merecía más respeto.
Se ha hablado largo y tendido del gran trabajo que hacen los actores bajo las directices de Steve McQueen en esta película y no creo que tenga nada que añadir a eso. El elenco es fantástico, bien elegido y muy integrado. Es efectivo a su manera. Y no me sorprende que Lupita Nyong'O sea una figura tan conocida después de esta película, porque siempre me pareció guapa, pero después de ver 12 años de esclavitud, para mi es casi una diosa (sin restarle mérito a Chiwetel Ejiofor, ojo). Michael Fassbender, Benedict Cumberbatch y Brad Pitt hacen un buen trabajo también, sobre todo los dos primeros pues el último me parece más un reclamo que otra cosa. Admiro como Fassbender ha conseguido que lo odie en esta película a pensar de lo mucho que me gusta normalmente, lo que hace que lo respete más. Y en realidad, para resumir, creo que el trabajo actoral de esta película es espectacular por todas partes pero Fassbender, Nyong'O y Ejiofor consiguen dejar a los demás en un segundo plano.
12 años de esclavitud no es el tipo de película que yo recomiendo, y no la recomiento porque al verla sufro. Pero al mismo tiempo, desde la sensación que tengo de que mi corazón se ha encogido de la angustia, creo que es una película necesaria para que todo el mundo que la vea se sienta un poco sobrecogido, un poco emocionado por lo que está viendo. Se ha dicho que peca de "lentitud" pero en este caso a mi me parece que le sienta bien. El espectador, si empatiza con los personajes, puede llegar a sentir lo largos y tortuosamente duros que esos 12 años fueron, lo que contribuye a la angustia final. Esta película es bonita desde el punto de vista fotográfico, la banda sonora es acertada y buena y la historia es poderosa, pero aun así yo no sé si la recomendaría. No me parece, en absoluto, una película que alguien deba ver para pasar un buen rato, pero es una de esas películas que se me antojan necesarias en la vida de toda persona, para que se nos encoja un poco el corazón, para que pensemos que no somos el ombligo del mundo por un rato... Porque a veces la películas también deben hacer que nos retorzamos ligeramente.
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