La verdad lleva tiempo

Titulo: Alias 

Año: 2001-2006

Género: Acción, crimen, drama

Creador: J.J. Abrams

Número de temporadas: 5

Esta es una de esas series que no mucha gente se pone a ver por voluntad propia sino que la pillas por la tele, mola, ves un capítulo y pasas el rato y eso está bien, pero creo que hay muy pocos como yo que decidieron ponérsela porque sí, de principio a fin y del tirón. Y la verdad es que no me arrepiento para nada.

La premisa de la serie es una mujer que trabaja para la CIA y tiene que conseguir identificar y eliminar a un grupo que pretende apropiarse de los objetivos de la CIA para vender las mercancias en el mercado negro. Bien, eso podria resumirse en un solo capitulo, ¿verdad? Pues no, porque J.J. Abrams es el creador de esta serie y con él, ya se sabe, no todo es tan sencillo como parece y esos elementos que tanto destacan en las creaciones de este hombre hacen acto de presencia muy claramente en esta serie y engancha de una manera que parece imposible. Quizás no tanto como Lost, que en mi caso era ver un capítulo y no parar hasta ver el siguiente, pero si lo bastante como para que si pretendes perder una hora viéndola...acabes perdiendo tres.

Con inicios de capítulo impactantes y finales todavía mejores, a lo largo de la serie ya da igual que haya algún capitulo de relleno porque sabes que el principio y el final te van a intrigar quieras o no. No explicaré de que va cada temporada porque van en cadena y sería hacer demasiado spoiler pero dejémoslo en que cada temporada tiene todos esos elementos de acción y tema esotérico que tanto le gustan a  Abrams, junto con personajes cerrados y duros que contrastan con otros más normales.

Alias tiene una estética de muy de principios de los años 2000 en algunas cosas, como la ropa de la protagonista pero es algo que cambia dependiendo del país en el que esté. Todo tiende a ser oscuro y de algún modo muy tecnológico y que en parte me recuerda a la idea que tenía de James Bond antes de ver ninguna  de las películas en las que salia porque tiene un montón de aparatitos chachis de estos típicos de James Bond como bolígrafos láser y mierdas así. Además, la banda sonora me gustó mucho porque te va marcando el ritmo de la acción de manera muy buena.

Supongo que no es una serie para todo el mundo, pero sí es una serie para esas personas como yo, a las que les encanta ver como una mujer le patea el culo a un montón de tipos que dudan de ella. La verdad es que la evolución de la trama solo ha hecho que me gustase más, aunque reconozco que la cuarta temporada se me hizo un poco larga y espesa de más porque el estilo se me atragantó un poco después de 3 temporadas. Y el final...bueno, no es lo importante, lo que realmente me gustó de la serie es como evoluciona y todo lo que va pasando y enrevesándose, pero el final es solo, eso...un final.

Alias es una serie muy recomendable para pasar el rato. Igual si la ves del tirón entras en un ciclo conspiratorio que te deja tonto un rato pero la verdad es que se disfruta muy fácilmente. Es uno de esos productos comerciales fáciles de digerir y que en ocasiones vienen muy bien. Además...a mi siempre me llena de adrenalina ver a Jennifer Garner peleando. Que hermosa y dura mujerzuela.

Sidney Bristow: Interpretada por Jennifer Garner es la protagonista indiscutible de la serie. Es una mujer en apariencia normal que está estudiando en la universidad para ser profesora, y que, en teoría, trabaja en un banco, aunque eso es sólo una tapadera para cubrir su verdadero trabajo como agente de la CIA. Es una mujer con una serie de habilidades concretas que parecen salir de ella de una manera natural y que sabe perfectamente como utilizarlas. Además es una persona perseverante, cabezota y orgullosa pero al mismo tiempo buena y leal a lo que debe ser. Me gusta especialmente que Jennifer parece mostrar un dolor de lo más real, y puede mezclarlo con pura concentración mientras trabaja. 

Alvin Sloane: Un personaje muy confuso interpretado por el pequeño Ron Rifkin. Es un personaje que parece ser íntegro pero también parece ocultar un lado muy oscuro. Es manipulador y...en ocasiones, pensé que una persona demasiado idiota para ser tan supuestamente inteligente.

Marcus Dixon: Interpretado por Carl Lumbly, es el compañero de Sidney y una de las pocas personas en las que confía plenamente. Es un hombre que hace el bien porque lo considera su deber y de algún modo es el más real de todos los personajes, dentro de las circunstancias porque es el que actúa de una manera más racional.

Marshall Flinkman: Interpretado por Kevin Weisman es el cerebrito de la CIA. Un hombre tímido que quiere a quien quiere y le es fiel y que, como Marcus, solo quiere hacer el bien. Es un cerebrito típico, la figura NERD que todos conocemos y que deberíamos respetar más de lo que lo hacemos.

Jack Bristow: El padre descariñado de Sidney encarnado por Victor Garber. Según su hija nunca fue un padre muy afectuoso y de hecho su relación no es muy buena. Es un hombre silencioso y eficaz que aparenta algo que en realidad puede no ser. La cara de poker de Garber es algo envidiable.

Michael Vaughn: Agente de la CIA interpretado por Michael Vartan. Un hombre regio y al mismo tiempo sensual que hace bien su trabajo pero tiene su corazoncito y parece notársele algo más que al resto.

Francie Calfo: Interpretada por Merrin Dungey es la mejor amiga de Sidney y es lo que todos entendemos por una mejor amiga

Will Tipin: Es el contrapeso de Francie, el mejor amigo, interpretado por Bradley Cooper. Haría cualquier cosa por Sidney y se nota que la adora pero no tiene ni idea de donde se mete la mitad del tiempo, aunque es un hombre encantador.

Esta serie es de esas que te ayudan a olvidarte de todo si tienes un mal día, porque por muy malo que sea jamás estarás tan al borde de la muerte como un espía.

Un millón a la semana

Título: El lobo de Wall Street, The wolf of Wall Street

Director: Martin Scorsese

Guión: Terence Winter, Jordan Belfort

Año: 2013

Género: Biopic, comedia, drama

Actores:

• Leonardo DiCaprio como Jordan Belfort
• Jonah Hill como Donnie Azoff
• Margot Robbie como Naomi Lapaglia
• Matthew McConaughey como Mark Hanna
• Kyle Chandler como el agente Patrick Denham
• Rob Reiner como Max Belfort
• Jon Bernthal como Brad
• Jon Favreau como Manny Riskin
• Jean Dujardin como Jean Jacques Saurel
• Joanna Lumley como la tia Emma
• Cristin Milioti como Teresa Petrillo
• Christine Ebersole como Leah Belfort
• P.J. Byrne como Nicky Koskoff 
• Kenneth Choi como Chester Ming
• Brian Sacca como Robbie Feinberg
• Henry Zebrowski como Alden Kupferberg

Argumento: Película basada en hechos reales del corredor de bolsa neoyorquino Jordan Belfort. A mediados de los años ochenta, Belfort era un joven honrado que perseguía el sueño americano, pero pronto en la agencia de valores aprendió que lo más importante no era hacer ganar a sus clientes, sino ser ambicioso y ganar una buena comisión. Su enorme éxito y fortuna cuando tenía poco más de veinte años como fundador de una agencia bursátil le valió el mote de “El lobo de Wall Street”. Dinero. Poder. Mujeres. Drogas. Las tentaciones abundaban y el temor a la ley era irrelevante. Jordan y su manada de lobos consideraban que la discreción era una cualidad anticuada; nunca se conformaban con lo que tenían. (Filmaffinity)

La última pieza de la colección Scorsese/Dicaprio ha llegado a los cines y nos ha dejado a algunos con el culo ligeramente torcido. Aunque si tengo que ser sincera lo que más me ha “torcido” es la maravilla de calidad con la que puedes ver una película en los cines de mi ciudad (léase con sarcasmo) y lo fantástico que es escuchar la música del pub de al lado mientras estás viendo una película. Críticas a instalaciones a parte, el tráiler de esta película me prometía una cosa que me gustaba, me dio exactamente eso y…curiosamente me decepcionó.

La película narra la historia de Jordan Belford, un chavalín con grandes ambiciones que aprendió de los mejores y se le acabó yendo la pinza de una manera terrible, porque, al parecer, ese es el precio psicológico del poder, sobre todo si lo tienes en la década de los 80. Es una historia de literal sexo, drogas y rock and roll, pero, como en casi todas las historias, la escasez de rock and roll se hace notar. Según transcurre el metraje, se puede ver como el protagonista necesita superarse una y otra vez porque sino no está satisfecho nunca. Su vida pasa de fiesta en fiesta, de prostituta en prostituta y de estafa en estafa, y mientras la ves…no te imaginas como terminará porque puede ser de cualquier manera, y cuando al fin lo hace, tras 3 horas, la sensación que te queda es que el final es una carcajada en la cara de algunos. Lo cual no está nada mal para una película basada en los excesos de una persona. He de reconocer que en algunos momentos me reí hasta llorar, pensando que no debería reírme de los efectos de las drogas pero…en serio, tiene partes descojonantes.

Los personajes de esta película giran todos alrededor de la figura de Jordan (DiCaprio) y muchas personalidades cambian por sus acciones. No hay santos en esta película, ni uno se libra porque, aunque haya personajes que se plantean como eminentemente buenos…acaban sucumbiendo, aunque sólo sea un poquito, al carácter codicioso y atrayente de Jordan, sobre todo si intenta venderles algo. Jordan sufre una transformación al principio de la película, que pasa de ser un chaval honrado a un canalla en unas…3 secuencias y a partir de ahí todo decae. El resto de personajes siguen más o menos el mismo camino, salvo algunos como Brad, que aunque no son malos, desde que te los presentan sabes que legales legales no son, aunque acaben teniendo más moralidad que los que empezaron bien. Me llaman la atención las mujeres de esta película, porque aunque algunas son objetos (prostitutas generalmente) otras, las más protagonistas, tienen más la cabeza sobre los hombros, sobre todo la primera mujer de Jordan. La segunda, Naomi (Margot Robbie) es guapa hasta decir basta, pero se deja llevar más por los excesos y consiente más a Jordan, aunque también se parece más a él. Son destacables, porque en el mundo de locura que envuelve al Lobo de Wallstreet, ellas parecen ser las que mantienen la calma en ciertos puntos, aunque claro… al lado de personajes como el de DiCaprio o el de Jonah Hill (Donnie, el segundo al mando) pues cualquiera es más cuerdo y tranquilo.

Scorsese sigue en la misma perfección visual que en todas sus películas. Se nota que es un hombre que te enseña todo lo que debes ver y te lo envuelve en un halo de belleza para que si, todo lo demás falla, te quedes embobado mirando la fotografía. Por suerte, en sus películas no suele fallar lo demás. Y aunque la belleza fotográfica no es lo que destaca en esta película, si tiene planos muy bien conseguidos y que reflejan muy bien la personalidad del personaje principal o sus circunstancias.

La banda sonora está muy bien, pero si esperabais oír la canción del tráiler vais de culo, lo cual me parece fatal porque es una buena canción, aunque entiendo que en el contexto igual no pegaba mucho….pero nos pusieron la miel en los labios para nada! Si sale y no lo noté, me disculpo, pero muy disimulada tendría que estar o muy metida yo en la película.

El lobo de Wall Street es una película….muy larga. Son tres horas de película, de buena película pero que a mí se me hizo larga en algunos puntos y ligeramente repetitiva en algunos aspectos. La recomendaría por la actuación de DiCaprio una y mil veces, pero siempre a gente con tiempo libre y paciencia.

Mark Hanna: Para tener éxito en este negocio, primero que nada, debes mantenerte relajado. ¿Te masturbas?

Jordan Belfort: Su vagina era como heroína para mí.

Naomi: Mami está muy cansada y aburrida de usar ropa interior.

Jordan: ¿Sí?

Naomi: Sí. De hecho... de hecho, ella ha decidido tirarlas todas a la basura. Así que mira bien, papi, vas a ver mucho de esto por la casa.

Jordan: Sí, mami.

Naomi: Pero sin tocar.

Después de ver esta película tengo aún menos ganas de probar las drogas, y eso que ya no tenía ninguna.

There's more to life than a happy ending

Título: Entre sus manos, Un atrevido Don Juan, Don Jon

Director: Joseph Gordon- Lewitt

Guión: Joseph Gordon- Lewitt

Año: 2013

Género: Comedia, romance

Actores:

• Joseph Gordon-Lewitt como Jon
• Scarlett Johansson como Bárbara
• Julianne Moore como Esther
• Tony Danza como Jon Sr.
• Glenne Headly como Ángela
• Brie Larson como Mónica
• Rob Brown como Bobby
• Jeremy Luke como Danny

Argumento: Jon Martello, un joven adicto al sexo en general y al porno en particular, intenta ejercer algún tipo de control sobre sí mismo. Jon tiende a deshumanizarlo todo: su apartamento, su coche, su familia, su iglesia y las mujeres. Sin embargo, hasta los ligues más sofisticados no pueden compararse con el placer que obtiene viendo pornografía en su ordenador. Insatisfecho con su vida, decide cambiar. Gracias a la relación con dos mujeres muy distintas, Barbara y Esther, aprenderá grandes lecciones sobre la vida y el amor. (Filmaffinity)

Hay películas que de entrada prometen y cuando te dicen que Joseph Gordon Lewitt va a dirigir y protagonizar su primera película y que la co- protagonista es Scarlett Johansson, el interés de personas como yo aumenta inconmensurablemente. Pero si, además, le añades que el personaje de Joseph es un adicto al porno y que su novia es Scarlett, yo compro fijo. Solo por la curiosidad de saber que iba a salir de tal argumento unido a tal elenco era necesario ver esta película. Además, si Joseph Gordon Lewitt es tan inteligente como para tirarse a Scarlett Johansson en su primera película digirida, merece que invierta un poco de mi tiempo en verla.

La historia es original en un primer momento. Un chiquillo que es un “chulo-putas” al que básicamente lo único que le interesa es vivir a su modo, conoce a una chica en un momento de crisis existencial y se dice: Esta es para mí. Todo ello bañado con un montón de imágenes de porno, mucho product placement (publicidad everywhere) y alguna aparición digna de Kevin Smith en lo que a Jay y Bob el silencioso “style” se refiere. Para los que no conozcáis las películas de Kevin Smith, os diré que suele aparecer un dúo, conocido como Jay y Bob el silencioso, que suelen ser personajes secundarios salvo en alguna excepción y que se caracterizan porque Jay habla todo el maldito rato y Bob solo abre la boca cuando es jodidamente fundamental o para decir algo necesario. Realmente, esta película ha hecho que tenga un montón de dudas sobre la adicción al porno, pero cuando aparece alguna adicción en una película siempre me quedo con el mismo tipo de dudas, como por ejemplo… ¿Qué comenzó esa adicción? ¿Tan insatisfecho estaba el personaje de Jon como para necesitar el porno de tal manera? Aish, me gustaría meterme en la cabeza del Joseph Gordon-Lewitt y saber la respuesta a todas mis preguntas, y de paso descubrir si también es un adicto al porno o al sexo.

El título de la película no miente en cuanto a quien es el protagonista. Joseph Gordon Lewitt es sin duda el centro de la película, todo gira en torno a cómo se siente, lo qué hace, con quién lo hace y cómo lo hace. Es un hombre que pretende ser egocéntrico, egoísta, religioso y caprichoso, y aunque, tiene un poco de todo eso, lo cierto es que lo único que parece querer es algo a lo que agarrarse y que le haga sentir algo más allá de sí mismo. Bárbara (Scalett Johansson) es una belleza como solo ella puede llegar a serlo, aunque reconozco que me gusta más pelirroja, concretamente en Iron Man 2. Es una mujer que se sabe guapa y es muy decidida, sabe perfectamente lo que quiere y lo que no quiere y no se va conformar con menos de lo que está planteado en su cabeza. Esther (Julianne Moore) es un personaje bastante secundario pero que…es uno de mis favoritos junto con la hermana de Jon. Es una mujer rara hasta decir basta, o al menos eso parece, pero es maravillosa. No pienso deciros más acerca de ella, si queréis conocerla, a ver la película. Aunque reconozco mi debilidad por Julianne…pero aún así es un personaje fantástico. Los padres de Jon son muy carismáticos porque no son nada aburridos ni corrientes. Bueno, quizás lo sean para el ambiente de la película pero a mí son de lo más pintorescos. Todo eso dejando a un lado que padre e hijo son calcaicos fisicamente. La verdad es que los personajes que menos me gustan son los protagonistas, tanto Jon como Bárbara, y creo que es una película muy nutrida de los secundarios que le dan mucha carisma al asunto, pero…¿no pasa así muchísimas veces?

Visualmente esta película no tiene nada raro. Tiene una imagen correcta que “aguapa” a los actores cuando tiene que hacerlo y los “afea” cuando es preciso. Lo que si me llamó la atención es el montaje que tiene cierta tendencia a Requiem for a dream o a algunas partes de Breaking bad (es una serie que todo el mundo debería ver!). Esto supone que en algunas partes, que reflejan la monotonía o las costumbres, el montaje se vuelve rápido y mecánico dando exactamente la sensación que busca, algo que también utilizan para lograr el efecto contrario, es decir, cuando algo pasa o la rutina se rompe el montaje cambia y el espectador nota una pausa que para su cerebro no debería estar ahí. Realmente, este tipo de montaje me parece muy difícil de hacer bien y es una de las cosas que más me llamó la atención de la película.

La banda sonora es algo que se adapta muy bien a cada situación en la que se encuentran los personajes. La mayoría son canciones conocidas y, en mi caso, consiguieron que acabara bailando ligeramente al escucharlas. La banda sonora le va al pelo al personaje de Jon y pensándolo un poco, también le pega mucho a Joseph Gordon Lewitt.

La verdad es que creo que es una buena película, pero que no volvería a ver. Me parece muy buena para ser el debut de un actor en el mundo de la dirección y más dirigiéndose a sí mismo. Es una película recomendable para un público adulto aunque tampoco esperéis ver nada erótico, porque es una película bastante inocente y…americana, a pesar de todo. Es divertida y está bien para pasar el rato, pero lo que sí os puedo decir es que probablemente no sea la mejor película que nos pueda traer Joseph Gordon Lewitt en el futuro.

Mujer: ¿Por qué nunca me llamaste?

Jon: Por favor, ya eres adulta. ¿Creíste que iba a llamarte?

Mujer: Eres patético, ¿sabes? Cada semana cambias de ligue.

Jon: Entonces, ¿por qué te fuiste conmigo?

Bárbara: Las películas y el porno son diferentes, Jon. Dan premios por esas películas. 

Jon:  Ya, y también dan premios a las porno.

Ver porno me parece una sana costumbre, pero todo en exceso es malo.

Are You Watching Closely?

Título: El gran truco, El truco final (El prestigio), The prestige

Director: Christopher Nolan

Guión: Jonathan Nolan, Christopher Nolan y Christopher Priest (novela)

Año: 2006

Género: Drama, misterio, thriller

Actores:

• Hugh Jackman como Robert Angier
• Christian Bale como Alfred Borden
• Michael Caine como Cutter
• Piper Perabo como Julia McCullough
• Rebecca Hall como Sara Borden
• Scarlett Johansson como Olivia Wescombe
• David Bowie como Nikola Tesla
• Andy Serkis como Alley

Argumento: En Londres, a finales del siglo XIX, una época en la que los magos eran los ídolos más aclamados, dos jóvenes ilusionistas se proponen alcanzar la fama. El sofisticado Robert Angier es un consumado artista, mientras que el tosco y purista Alfred Borden es un genio creativo, pero carece de la habilidad necesaria para ejecutar en público sus mágicas ideas. Al principio son compañeros y amigos que se admiran mutuamente. Sin embargo, cuando el mejor truco ideado por ambos fracasa, se convierten en enemigos irreconciliables: cada uno de ellos intentará por todos los medios superar al otro y acabar con él. Truco a truco, espectáculo a espectáculo, se va fraguando una feroz competición que no tiene límites. (Filmaffinity)

He de reconocer que El truco final tiene una combinación imbatible de cosas que me gustan y que vienen a ser: Christian Bale, Christopher Nolan e Ilusionismo. Y tras verla, he de añadir a esta lista a Hugh Jackman. Esta película fue la competidora, en su época, de El ilusionista, que tenía como protagonista a Edward Norton, y hace mucho que no veo esta última, pero recuerdo que también me había encantado y no puedo decir que no me guste cuando pasa eso de que dos películas en principio iguales sean dignas de ser vistas. Aún así, y con la impresión sobre El ilusionista ligeramente gastada, creo que me quedo con El truco final o El prestigio, como prefiráis llamarla, otra de esas grandes recomendaciones del Doctor E.

El argumento de El truco final me pareció realmente muy original aunque no sé muy bien por qué. Se podría resumir en una historia que engloba la rivalidad entre dos magos que salieron del mismo sitio pero que toman caminos distintos en función de los errores que van cometiendo. Todo comienza como una historia de amor y de venganza, pero termina como una historia de ambición desmedida y de querer superar al otro, y aunque la venganza no llega a desaparecer…se difumina a favor del ansia por superar al otro a cualquier precio. El final te deja un poco con el culo torcido pero tiene todo el sentido del mundo. Es un poco como Memento, o The dark knigth rises (otras de las películas de Nolan), en las que el final es el climax perfecto de cualquier película porque te deja con la típica cara de: NO PUEDE SER! pero en el fondo lo piensas y...tiene sentido. Sin embargo, en El truco final, más importante que todo eso, es la evolución de los personajes, lo que pueden llegar a hacer para superar al otro, destruirlo o morir en el intento; no importa quién gane, importa lo que están dispuestos a hacer para lograrlo, y francamente…me parece impresionante lo que consiguen y la sensación con la que poco a poco te van dejando.

La historia gira en torno a Robert Angier (Jackman) y Alfred Borden (Bale), dos magos que aparentan ser muy distintos pero son realmente…iguales. Robert es una persona eminentemente feliz al principio, su vida va bien y le gusta, tiene sus aspiraciones pero cuida sus limitaciones y protege lo que quiere. Alfred parece totalmente distinto, una persona volcada 100% a su vocación y que moriría por ella, dispuesto a arriesgar lo que haga falta y sacrificarse lo que haga falta para lograr ser el mejor, algo que Robert no termina de entender del todo. Ambos personajes empiezan siendo normales para terminar siendo consumidos por la ira y la ambición…a cualquier precio. Las chicas de la película son Sara (Rebeca Hall), Julia (Piper Perabo) y Olivia (Scarlett Johansson). Sara es la adorada de Alfred y me parece una mujer adorable, típica de la época pero inteligente aunque algo ingenua. Hay momentos en que por como Bale la mira realmente parece que la amase con todo su corazón. Julia es la mujer de Robert, y es atractiva, atrevida, divertida y luchadora a pesar de ser presentada como la ayudante de un mago y en apariencia una mujer florero. Por último, Olivia es la que conoce a los dos personajes masculinos más en profundidad, es de algún modo la mujer más moderna de la película porque se ve que es la que tiene menos prejuicios en algunos temas pero…para ser sincera, las mujeres en esta película, como solía pasar en el mundo de la magia, son un adorno que reconducen el espectáculo y hacen que la vista se distraiga mientras el mago lleva a cabo sus trucos…no sé si me entendeis. Cabe destacar la presencia de David Bowie como Nikola Tesla y de Andy Serkis como Alley, que aparecen de manera casi fugaz, pero me parece que la película no sería lo mismo sin ellos, de algún modo, son lo bastante excéntricos y extraños para darle un toque especial a sus personajes. Por último, Michael Caine, sigue acompañando a Batman en esta película y hace de Cutter, el que diseña los trucos para los magos desde un primer momento. Es el ingeniero y como siempre…de algún modo ejerce de la voz de la razón.

El aspecto visual de esta película me resulta muy agradable. Tiene cierto tono de oro gastado y viejo que yo ya relaciono con la época en la que transcurre la historia y que me parece el tono adecuado cuando hablamos de ilusionismo de este tipo. Aun así, todo se va a haciendo más oscuro a medida que la película transcurre, pero no se nota demasiado porque pega perfectamente con el sentimiento que despierta en el espectador y la evolución de los personajes.

No creo que El truco final sea una película para cualquiera. No es una película en la que puedas disfrutar de una acción trepidante o de un montón de explosiones o cosas así, pero es una película muy buena para alguien sepa apreciar el cine y entretenerse con él. No es tampoco una película que yo vería en familia, porque ciertas escenas pueden dañar la sensibilidad de algunos, pero si es una película que recomiendo encarecidamente a la gente a la que le guste el buen cine y quiera pasar un rato entretenido y…comiéndose la cabeza un poco con algunos trucos.

Cutter: Todo efecto mágico consta de tres partes o actos. La primera parte, es la presentación: el mago muestra algo ordinario, una baraja de cartas, un pájaro o una persona. El mago lo exhibe, os puede invitar a que lo examinéis, para que veáis que no hay nada raro. Todo es normal. Pero claro, probablemente no sea así. El segundo acto es la actuación: el mago, con eso que era ordinario, consigue hacer algo extraordinario. Entonces intentareis descubrir el truco, pero no lo conseguiréis, por que en el fondo, no quereis saber cuál es. Lo que queréis es que os engañen. Pero todavía no aplaudiréis. Que hagan desaparecer algo no es suficiente, tienen que hacerlo reaparecer. Por eso, todo efecto mágico consta de un tercer acto, la parte más complicada de este acto, es el prestigio.

Nikola Tesla: La sociedad solo tolera un cambio a la vez. La primera vez que cambié el mundo, me aclamaron como visionario. La segunda vez, me pidieron gentilmente que me jubilara.

Alfred: El sacrificio es el precio de un buen truco. 

Yo adoro la magia, pero me gusta pensar que es real. Soy una ingenua, lo sé, pero la magia es una de esas cosas buenas de la vida que es mejor cuando no puedes explicar.