martes, 3 de septiembre de 2013

No se puede bailar el tango borracho


 

Título: Love (et ses petits désastres), Love and other disasters, Amor y otros desastres
Director: Alek Keshishian
Guión: Alek Keshishian
Año: 2006
Género: Comedia romántica
Actores:
  • Brittany Murphy como Emily Jackson (Jacks)
  • Matthew Rhys como Peter Simon
  • Catherine Tate como Tallulah Riggs- Wentworth
  • Elliot Cowan como James Wildstone
  • Jamie Sives como Finlay McMilian
  • Santiago Cabrera como Paolo Sarmiento
  • Stephanie Beachman como Felicity Riggs- Wentworth
  • Will Keen como David Williams

Argumento: Emily Jackson "Jacks" es la celestina ideal para sus amigos del alma: Peter, un gay que comparte piso con ella, y Tallulah, una neurótica hambrienta de hombres. Pero con tanto arreglar las parejas de los demás, ¿sabrá Jacks reconocer a su gran amor cuando éste llame a su puerta? (Filmaffinity)






Creo que puedo afirmar sin equivocarme que es la primera vez que hago una crítica de una comedia romántica. Siendo francos es algo que tenía que acabar pasando dado que yo veo todo tipo de cine y como mujer…en ciertas épocas de mi vida lo que más me apetece es una buena mariconada para comerme con una ingente cantidad de chocolate. Pero esta película en concreto es especial para mí. Por un lado porque me recuerda a mi mejor amiga ( Hola Misssh!) ya que creo recordar que fue ella quien me la recomendó. Y por otro lado porque, al igual que Love Actually, dentro de su género me parece bastante original.


La historia es una historia bastante corriente. Chica y chico viven juntos. Mejores amigos, adorables, inseparables. Chico tiene problemas porque no encuentra chico perfecto para él, dado que tiene las relaciones idealizadas. Chica tiene miedo a que le hagan daño y se acuesta con gente a la que no quiere para no llegar a querer a alguien con quien no se acuesta. Y alrededor de todo esto, hay gente excéntrica de todo, unos amigos increíblemente buenos, malentendidos, errores y el tiarrón de turno, que por supuesto no podía faltar. Y os preguntareis: ¿No era un argumento original? ¡Sí! Porque aunque tenga todos los ingredientes para ser una película pastelosa más, la manera de contarlo es diferente a la par que muy inglesa. La historia está contada como meta-cine, de modo lo que lo estamos viendo es una película de una película y que al mismo tiempo hace un montón de guiños y pequeñas sátiras a las comedias románticas tradicionales. Por eso me gusta.


Los personajes de Amor y otros desastres son…adorables en su mayoría. Son personas normales que no afrontan más retos que los que cualquier otra persona. Son gente con sus latiguillos, sus defectos y sus tics cuando se ponen nerviosos. Brittany Murphy (DEP), Jacks en la película, es una mujer con un pasado no muy alegre pero que salió adelante con la mejor de las sonrisas y que pretende parecerse a Audrey Hepburn. Es una mujer que nunca dice lo que siente verdaderamente pero que se desvive por ayudar a los demás en todo lo que esté en sus manos y que odia hacerle daño a otros. No me puedo imaginar una opción mejor para el papel de Jacks que la que ya la representa, si fuera otra, no tendría tanto encanto. Peter, Matthew Rhys, es un soñador empedernido que pierde el tiempo fantaseando en vez de centrarse en cumplir sus sueños, en parte porque tiene pánico a que lo rechacen, a no ser lo bastante bueno. Paolo, Santiago Cabrera, es EL CHICO DE LA PELÍCULA. Es el hombre perfecto estándar y quizás por eso es uno de los personajes que menos me gustan (soy de esas personas que no quieren al perfección estándar). Pero mi personaje favorito es Tallulah (Catherine Tate). Está completamente loca, es una histérica, una persona de lo más nervioso que hay y al mismo tiempo es simpática, divertida y de lo más sarcástica y lo único que quiere es que alguien la quiera de verdad, tal y cómo es. Y del mismo modo que pasa con Brittany Murphy, no creo que otra actriz la interpretara mejor.


No hay mucho que decir del aspecto visual salvo lo cuidado que está el vestuario, el maquillaje y la peluquería. Todo ello hace que cada personaje se entienda mejor individualmente y puedes ver sus inseguridades y su carácter en cómo van vestidos o peinados, algo que se nota sobre todo en los personajes de Tallulah y de Paolo.


La banda sonora es buena y apropiada pero no es con lo que te quedas al ver la película. Siendo francos, cuando uno ve una comedia romántica no suele quedarse con la banda sonora a no ser que la película tenga partes musicales o sea muy mala. Sin embargo, cierta alusión a Desayuno con diamantes en el ámbito musical si ha llamado especialmente mi atención.


Amor y otros desastres es una película que acabo de recuperar después de mucho tiempo sin verla por la muerte de Brittany Murphy. Diréis, ¡Qué chorrada más grande! Lo que queráis, pero no me sentí preparada para verla de nuevo hasta hace poco. Por otro lado, no es una película que recomiende a todo el mundo. Es una película romántica, con toques de humor inglés y con una pequeña crítica a la clase alta de Londres. Si sentís pasión por la sangre, las explosiones y o los dramas, no es vuestra película. Tampoco esperéis de ella que cambie vuestras vidas, aunque quién sabe. Pero si queréis pasar un buen rato o pasar “una tarde de chicas” esta película es muy recomendable. Y recordad: La mejor manera de medir las fases de una relación, son los pedos.


Peter: ¿De qué sirve follar con alguien hasta la saciedad sabiendo que nunca vas a amarle?

Jacks: Sigo teniendo esperanzas de que me ocurra, de que un día me despierte y este.
Peter: ¿Qué?
Jacks: ¡Enamorada! Mareada y febril y con nauseas...
Peter: Eso no es amor, es gripe.

Peter: ¿Te has planteado que eso del amor verdadero pueda ser una conspiración?

Terapeuta: Las etapas de una relación se pueden medir por los pedos. La primera etapa es la "conspiración de silencio". Es un periodo de fantasía en el que ambas partes fingen que no expulsan residuos corporales. Esta ilusión se frustra muy pronto con ese "Uy, ¿te has tirado un pedito?", seguido del avergonzado reconocimiento de la verdad. Esto anuncia un periodo de mayor intimidad, un periodo al que me gusta llamar "Luna de miel ventosa", en el que ambas partes les parece que el gas del otros es la broma más graciosa del mundo. Pero claro, ninguna luna de miel dura eternamente. Y así alcanzamos "El desdoblamiento crítico de la flatulencia". O bien el pedo pierde la capacidad de divertir e incomodar, significando así el amor verdadero, o bien empieza a molestar y dar asco, simbolizando así todo lo que está bloqueado y lo rancio de la persona que se amaba.

Jacks: Quizá el amor no sea algo que te ocurre, quizá sea algo que tu escoges.




Echo de menos las tardes lluviosas de invierno viendo películas ñoñas con mi amiga. A veces la felicidad está en las cosas más simples.

La decimoquinta prueba es: una imagen de la mejor escena de cine


Mi elección ha sido una de las más destacables escenas de Pulp Fiction. Se trata de esta en la que Jules y Vincent van a por el maletín de Marcelus. Buenísima. Al pensar en la mejor escena, la primera que me vino a la mente fue esta.



3 comentarios:

  1. Mi lista de pelis pendientes aumenta a pasos agigantados, aunq creo q sta ya la vi ;S
    Por cierto sabes quien soy?? xoxo B

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  2. Ha sido difícil el reto. Bien lo sabes tú, creo yo xD Pero bueno, ahí va.

    http://www.forumla.de/attachments/filmforum/21115d1214903789-cloverfield-2-untitled-32.jpg

    Entre que los monstruos gigantes me producen un pánico impresionante (mucho más si salen del mar), el final de Monstruoso (Cloverfield), con la cámara grabando directamente el feo careto del monstruo (por ahí lo llaman "Clover"), sabiendo lo que venía a continuación... Una escena que me puso los pelos de punta, literalmente.

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