viernes, 13 de septiembre de 2013

Quid pro quo



Título: El silencio de los inocentes, The silence of the lambs, El silencio de los corderos
Director: Jonathan Demme
Guión: Ted Tally y Thomas Harris (novela)
Año: 1991
Género: Crimen, drama, terror
Actores:
  • Jodie Foster como Clarice Starling
  • Anthony Hopkins como Dr. Hannibal Lecter
  • Scott Glenn como Jack Crawford
  • Anthony Heald como Dr. Frederick Chilton
  • Frankie Faison como Barney
  • Brooke Smith como Catherine Martin
  • Ted Levine como Jame Gumb
Argumento: El FBI busca a "Buffalo Bill", un asesino en serie que mata a sus víctimas, todas adolescentes, después de prepararlas minuciosamente y arrancarles la piel. Para poder atraparlo recurren a Clarice Starling, una brillante licenciada universitaria, experta en conductas psicópatas, que aspira a formar parte del FBI. Siguiendo las instrucciones de su jefe, Jack Crawford, Clarice visita la cárcel de alta seguridad donde el gobierno mantiene encerrado a Hannibal Lecter, antiguo psicoanalista y asesino, dotado de una inteligencia superior a la normal. Su misión será intentar sacarle información sobre los patrones de conducta de "Buffalo Bill". (Filmaffinity)








Si tengo un defecto dentro de mi vida cinéfila es que no he visto algunos de eso clásicos imprescindibles de los que todo el mundo habla y dice que son tan buenos. El silencio de los corderos entraba dentro de ese grupo de clásicos que yo no había visto y, una vez más, Dr. E ha venido a iluminarme con su sabiduría (aunque en este caso no fue el único). Estoy plenamente contenta de haber terminado de una vez con mi tiempo sin El silencio de los corderos.




A pesar de lo que he tardado en ver la película, ya sabía cuál era el argumento. Clarice, una agente aprendiz del FBI es encomendada a entrevistar al asesino en serie Hannibal Lecter con el fin de conseguir su colaboración. Clarice destaca por su inteligencia y el Dr. Lecter no lo hace precisamente por lo contrario, además de por su salvajismo y sus hábitos alimenticios. La película gira en torno a la relación que establecen Clarice y el Dr. Lecter en la que intercambian información de manera que el doctor la ayuda con el caso de Buffalo Bill, un asesino que degüella a sus víctimas, mientras que ella le cuenta cosas de su pasado a él para satisfacer su curiosidad. Después de verla, he logrado comprender del todo lo que todo el cine contemporáneo ha bebido ya no sólo de la historia, sino de toda la película, además de todos los guiños que aparecen en películas como Con el arma a punto o en Little Nicky. No os desvelo más de la historia por si os desvelo algo que no debiera, pero os aclararé que, aparte de ser violenta, la violencia que aparece en la película está de algún modo justificada psicológicamente por los traumas de los distintos personajes.



Nadie que no fuera Jodie Foster y Anthony Jopkins habría podido interpretar a Clarice y el Doctor Lecter de la manera que lo hicieron ellos. Son PERFECTOS para esos papeles y el cómo ha envejecido esa película no hace más que darme la razón en esa afirmación. La película se mete muchísimo en la psicología en cada uno de los personajes y es algo que en absoluto le sobra a la historia. Clarice es una mujer inteligente que busca valerse por sí misma y que de alguna manera ansía salvar la vida a alguien para llegar a sentirse útil y necesaria. El doctor Lecter es fascinantemente misterioso. Es un hombre indudablemente inteligente, metódico, reflexivo y, aunque un asesino bastante despiadado, es todo un caballero que sabe distinguir cuando una persona es verdaderamente valiosa o inteligente, aunque a su egoísta manera.


El aspecto visual de El silencio de los corderos es íncreíble. Lo que destaca en este sentido son los tipos de plano y el montaje que, por un lado busca hacer entender al espectador la psicología de los personajes, con los tipos de plano, y por otro lado pretende engañarlo para que piense que la conclusión es la contraria a la real. Los primeros planos de los distintos personajes son algo impresionante y todo en lo que salga Hannibal Lecter es algo de lo más señorial, como él. Y de algún modo…todos parecen tener los ojos azules y eso destaca muchísimo, el espectador no puede dejar de mirar a los ojos a los actores, es como si estuvieran mirando directamente a través de la pantalla y además, de una manera muy intensa. Y como dato…hay un plano de lo más épico que compositivamente es precioso.


La música de esta película me parece fantástica. No es que sea algo muy presente, pero cuando aparece es fundamental. Hay un punto en el que parece que la música representa una visión celestial y es precioso. El resto del tiempo, la música acompaña a la trama, la intensifica, como debe hacer una buena banda sonora.

Antes me sentía decepcionada conmigo misma por no haber visto esta película, y después de verla me doy cuenta de que tardé demasiado en hacerlo. A pesar de que no es una película para todos los públicos yo creo que sí es una película que podría ver cualquiera, a excepción de los niños que probablemente no la entenderían del todo y verían sangre por todas partes. Es plenamente recomendable y se ha convertido en un clásico por algo, creedme.





Dr. Hannibal Lecter: Quid pro quo, agente Starling

Dr. Hannibal Lecter: Buenas noches, Clarice

Dr. Hannibal Lecter: ¿Han dejado ya de llorar los corderos, Clarice?







Soy de esas personas convencidas de que la carne humana sabe a pollo.


La decimosexta prueba es: Una imagen del personaje más odiado



Se trata del hijo del Senador Roark, el bastardo amarillo. Lo odio, para quien haya visto la película entenderá muy bien por qué xD

3 comentarios:

  1. Ha sido difícil. Es difícil superar a Roark hijo, aunque seguro que hay alguno peor. En mi caso...

    http://s2.hipertextual.com/wp-content/blogs.dir/10/files/2010/03/avatar-stephen-lang-as-colonel-quaritch.jpg

    El Coronel Miles Quaritch de Avatar. Este tío... me cae mal porque no tiene un auténtico motivo para ser tan jodidamente cabrón. Además, se convirtió en una especie de "clon" de Keamy en Perdidos, otro personaje cuya maldad nunca vi justificada. Así que, eso, se gana el puesto.

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  2. Al fin, muchacha! Es una de mis películas favoritas, sin duda. Hay otras, igualmente sale Anthony Hopkins pero ya no son lo mismo, no sale Jodie Foster. Yo quiero conseguir los libros, terror concentrado, sin duda.

    Quid pro quo.

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  3. Yo creo, Cris, que más que satisfacer la curiosidad de Hanibal Lecter al preguntarle por el pasado de Clarice, se trata más de ejercer de psicólogo sobre ella. De hecho, el hecho de que "se hayan callado ya los corderos" significa la curación del trauma infantil de la protagonista, y con ello, la consecución de su objetivo, atrapar a Buffalo Bill venciendo sus miedos.
    Es decir, que se podría decir que Lecter le ayuda de 2 maneras, dándole pistas sobre los patrones del psicópata, y ayúndadola a ella a superar su miedos.
    Espero más críticas! Te felicito por tu blog :)

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