domingo, 5 de marzo de 2017

Here's to the fools who dream








Título original: La La Land, City of stars
Año: 2016
Director: Damien Chazelle
Reparto:
  • Ryan Gosling como Sebastian
  • Emma Stone como Mia

Argumento: Mia (Emma Stone), una joven aspirante a actriz que trabaja como camarera mientras acude a castings, y Sebastian (Ryan Gosling), un pianista de jazz que se gana la vida tocando en sórdidos tugurios, se enamoran, pero su gran ambición por llegar a la cima en sus carreras artísticas amenaza con separarlos. (FILMAFFINITY)




La ciudad de las estrellas, o LA LA LAND, es probablemente la película más comentada en los últimos meses por...bueno, por todo el mundo. Era la gran favorita para los Oscars, con récord de nominaciones, se decía, aunque si no me equivoco, era mentira, porque estaba igualada con Titanic y con Ben-hur. Y si de verdad pensabais que iba a vencer a Titanic debéis de vivir en otro planeta porque por muy buena que sea "La ciudad de las estrellas", Titanic hizo llorar a más personas en su primera semana de lo que LA LA LAND probablemente consiga en años. Pero no nos vayamos más por las ramas porque como empiece a divagar os diré que lo único que parece hacer falta últimamente para ganar un Oscar, o para ser uno de los favoritos, es tener un montón de planos secuencia o haber rodado en unas condiciones tan extremas de casi morirse.


Fui a ver LA LA LAND con el hype bastante alto. Todo el mundo decía cuan maravillosa, bonita, alegre y perfecta era la película. El peliculón del año o algo así debía ser para algunos. Yo, tras ver el tráiler, la película no parecía que me fuera ni me viniera pero si todo el mundo estaba tan emocionado con la maldita película pues por algo debía ser. Acallé ese instinto de hater que me sale cuando todo el mundo adora algo de lo que yo no estoy segura (y que me hizo esperar hasta pasar de los 20 para ver Star Wars), pensando que si antes me había equivocado, también podía equivocarme yo ahora y estar ante una obra maestra del género que me trajese de nuevo la sensación que me habían dejado películas como "Cantando bajo la lluvia". Además, LA LA LAND es el musical para los que no les gustan los musicales (al parecer) así que era dos por uno porque era un clásico con algo novedoso. Bien. Las puertas del cine se cerraron, las luces se apagaron y la película, la gran favorita Ciudad de las estrellas dio comienzo.


Creo que ya no desvelo nada terrible a nadie si os digo que la primera canción es digna de un musical clásico. Es una canción que despilfarra energía, alegría, buen rollo. Es fabulosa hasta el punto de dar un poquillo de vergüenza ajena por tanta maldita alegria que desprende esa gente. Eso sí, una vez esa canción termina, la película cambia de tono radicalmente hasta el punto que cabría preguntarse: Qué cojones (con perdón) hace esa canción ahi? Es un gancho para venderle al espectador algo que no le vas a dar? Es la pildorita de musical clásico que añadió alguien solo para poder decir que bebía de los musicales clásicos? No lo sé, pero no os dejeis engañar por esa primera canción. A pesar de todo, esa primera canción, musicalmente hablando, me parece la peor canción de todas. La película continúa después de ese arrebato de alegría y la historia empieza a desarrollarse de verdad. Se plantea todo como una comedia romántica con música y baile por el medio en la que sorprende que Emma Stone y Ryan Gosling tengan tanto talento musical, pero la lectura entre líneas de la historia deja otro sabor muy distinto al que dejaría una comedia romántica.


La elección de actores en esta película me parece terriblemente afortunada porque realmente estoy convencida de que otras dos personas diferentes a Emma Stone y Ryan Gosling no podrían haberla hecho funcionar, en absoluto. Pero ellos pueden. Y el resto de personajes dan más igual, incluso John Legend a modo cameo/debut, están ahí porque sabemos que hay mundo más allá de los protagonistas pero...ya. La química que hay entre Emma y Ryan, la manera que tienen de moverse, de actuar, todos sus pequeños detalles los hacen perfectos porque te crees perfectamente que puedan estar en esa situación. La amistad entre ellos se nota en su actuación, pero también, tal y como se pudo ver en Whiplash, la mano del director esta permanentemente presente en la acción. Su estilo de dirigir ya se hace muy obvio para mi y eso que solo he visto dos de sus películas. En LA LA LAND, todo parece estar estudiado, y eso es algo que debe ser así, claro. Cada plano, cada color, cada peinado, cada palabra, cada maldita estrella del cielo parece estar estudiada para crear en el espectador una sensación muy concreta y la verdad...no sé si fue el director el que falló, si es el mundo en general o soy yo y los "haters de mi calaña" los que tenemos el problema, pero a mí la película me trasmite de todo menos alegría. Al contrario que a muchos otros, yo salí de la película pensando que había visto una película genialmente hecha y asombrosamente triste. Realista, sin duda, pero muy triste. Me dejó plenamente decepcionada y descorazonada salir de aquella sala en la que todo el mundo parecía estar bañado de una felicidad azul mientras que yo salía con cara de haber chupado un limón porque tenía la sensación de que habían jugado con mis sentimientos al decirme que era una película que desprendía buen rollo.



LA LA LAND es una película genial, perfectamente llevada a cabo, pero es azul. Y no azul literalmente como podría ser la primera película de Crepúsculo, no, azul en sentimientos. Hay detalles azules en la película por todas partes. Es melancolía pura. Y no es un músical. Cantando bajo la lluvia es un musical. Los miserables es un musical. Moulin Rouge es un musical. La ciudad de las estrellas no lo es, es simplemente una película en la que la gente canta. Considerarías un película de Disney de las de toda la vida un musical? No, verdad? Pues eso.



Creo que el motivo principal por el cual soy detractora de esta película es porque creo que la estan juzgando por donde no es. Creo que juzgarla como un canto al "persigue tus sueños" es un autoengaño como tantos otros que nos comemos todos los días sin darnos cuenta y creo que es una película realista y triste pintada de colores brillantes y con notas agudas para camuflarlo y despistar. Si aun tenéis la oportunidad de ir a verla, o pensáis hacerlo más adelante, mi consejo es que no esperéis nada de ella. No esperéis ni alegría ni tristeza, ni algo bueno ni algo malo, solo disfrutadla y cuando termine...dejaos inundar por la sensación que os deje, sea feliz o triste. Al fin y al cabo, para eso esta el cine, verdad?



El reto de la entrada es...............................Mejor episodio piloto


Ahora mismo las que me venían a la cabeza eran Lost y Stranger Things y creo que me voy a quedar con la segunda porque creo que hay muy pocas series que me diesen tantas ganas de ver el segundo capítulo. Es un empezar y un no parar más con esta serie.









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