The dream is real

Título: El origen, Origine, Inception, Origen

Director: Christopher Nolan

Guión: Christopher Nolan

Año: 2010

Género: Acción, ciencia-ficción

Actores:

• Leonardo DiCaprio como Dominic Cobb
• Joseph Gordon- Lewitt como Arthur
• Ellen Page como Ariadne
• Tom Hardy como Eames
• Ken Watanabe como Kaito
• Dileep Rao como Yusuf
• Cillian Murphy como Robert Fischer
• Marion Cotillard como Mal Cobb

Argumento: Dominic Cobb es un experto en el arte de apropiarse, durante el sueño, de los secretos del subconsciente ajeno. La extraña habilidad de Cobb le ha convertido en un hombre muy cotizado en el mundo del espionaje, pero también lo ha condenado a ser un fugitivo y, por consiguiente, a renunciar a llevar una vida normal. Su única oportunidad para cambiar de vida será hacer exactamente lo contrario de lo que ha hecho siempre: implantar una idea en el subconsciente en lugar de sustraerla. Sin embargo, su plan se complica debido a la intervención de alguien que parece predecir cada uno de sus movimientos, alguien a quien sólo Cobb podrá descubrir. (Filmaffinity)

Si tengo que ser sincera no recuerdo muy bien las circunstancias en las que vi esta película por primera vez. Creo que fue en el cine, en una de las últimas sesiones que la ofrecían, pero no recuerdo que me llevó a ello ni porqué. Conociéndome, eso no es demasiado importante porque a veces voy al cine por puro placer o porque no tengo nada mejor que hacer, pero a ver visto esta película en la gran pantalla es algo que me habría gustado repetir. Una prueba más de que Nolan… es uno de los grandes.

El argumento gira en torno a Dominic Cobb y su grupo de extractores que se ganan la vida extrayendo ideas de la mente de ciertas personas a cargo de otras. No es una actividad muy lícita, pero cuando un magnate lo descubre le encarga llevar a cabo el mayor reto para los de su profesión: integrar una idea en la mente de otra persona. Todo esto navegando por los sueños las personas lo que hace que todo sea posible en el transcurso de la película y da pie a una serie de imágenes totalmente surrealistas pero que en el contexto de la película están totalmente justificadas. La escusa del argumento es una serie de asuntos comerciales que por sí solos no serían demasiado interesantes, pero que dan pie a un montón de otros argumentos que sí lo son y que hacen olvidar al espectador como empezó todo. Personalmente, es una película que me hace pensar mucho en casi todo y de algún modo emparanoyarme un rato después de terminar de verla porque plantea preguntas como ¿de verdad es tan importante la realidad? O… ¿cómo sabemos cuando estamos soñando y cuando no? ¿Es la vida un sueño? Y alguno dirá, “si la vida fuera un sueño podríamos controlarlo”. A todas las personas que piensen eso les recomiendo esta película. Además, toca otros muchos temas, como pasa con todas las películas de Nolan que pueden impresionar a cualquier tipo de público porque es como si contemplara la condición humana desde sus mismas bases y supiera perfectamente cómo llegar al corazón de todos sus espectadores. Además, y es algo que por lo que he visto no se tiene en cuenta muy a menudo, esta película muestra una de las historias de amor más reales y crudas del cine actual. No tiene las pastelosidades típicas y es una de mis historias de amor favoritas.

El cast de Origen es totalmente conocido y si hay alguna cara que no os suena es que os falta alguna película fundamental que ver o no tenéis internet. Vayamos por orden. Leonardo DiCaprio es el encargado de dar vida a Cobb, y como ya todos deberíamos saber es difícil que haya algún papel que se le resista y a pesar de eso, temo que se convierta en el sucesor de Gary Oldman y la comisión de los Oscars nunca reconozca el verdadero talento que tiene (tienen, ambos). DiCaprio sabe plasmar a la perfección toda la complejidad que desprende el personaje de Cobb, toda su confusión y culpabilidad, al mismo tiempo que todo su talento. Refleja que es el mejor del mundo en lo suyo, pero que, como todos, tiene sus traumas y que no son precisamente fáciles de sobrellevar. Me parece un personaje fascinante por su capacidad de mando y versatibilidad y por todo lo que va mostrando a lo largo de la trama. Me parece un protagonista maravilloso que no podría haber sido mejor representado por otro actor. Leonardo DiCaprio ES Dominic Cobb. 

El segundo en la escalera de mandos es Arthur, Joseph Gordon-Lewitt fuera de Origen, una de esas grandes revelaciones de esta década y que se va a estrenar en breve como director de una película (que por cierto, espero ver en el cine). El personaje de Arthur es diferente a todos los personajes que yo conozco suyos, pero no por eso le pega menos. Sabe captar a la perfección ese tipo de seriedad y elegancia que desprende el personaje. No cuentan mucho de él, pero es el Watson si en este cuento Cobb fuera Sherlock Holmes. Es el ayudante perfecto para el traumatizado jefe perfecto. DiCaprio y Gordon-Lewitt pegan muy bien en esta película como equipo y, al igual que pasaba con el primero, otro actor no lo habría hecho mejor.

Ellen Page interpreta a Ariadne, la arquitecta, que es un personaje fundamental pero que su importancia se va viendo a medida que la trama avanza. Al principio de la película…es una metomentodo sin más (claramente no es de mis personajes favoritos, pero yo para esas cosas soy bastante rara). Tom Hardy también hace acto de presencia como Eames y es el que aporta el toque de humor a la trama, el falsificador. Es un actor bastante desconocido para lo bueno que es, pero a pesar de que sus trapecios no salgan demasiado en esta película, su actuación merece la pena.

Mal Cobb es interpretada por Marion Cotillard, con la desgracia para los españoles de que carga con uno de los peores doblajes del cine. Ella es la mala de la película y sus motivaciones no están claras hasta el final en el que una mente un poco ágil puede llegar a entender todo a la primera. Es un obstáculo continuo, un grano en el culo para todo el equipo, pero la película sería imposible sin ella. Y, como mi amor por ella es puro, no la cambiaría por otra actriz.

Ken Watanabe es el responsable de Kaito, el magnate que pone en marcha toda la trama, el que pide Origen y con su actitud de chulo “Mírame, soy rico” aporta un punto muy interesante a la acción. Él es un turista en el mundo de los sueños pero un turista necesario. Cillian Murphy es la escusa. Él es el contexto y por lo tanto un personaje secundario, como en la trilogía del caballero oscuro, pero no parece que esos papeles secundarios que empujan la trama le vengan nada mal. Personalmente, es un hombre que me da muy mal rollo. El único actor al que le saco punta en esta película es Pete Postlethwaite, que así como Michael Caine queda perfecto como padre de Cobb, Maurice Fischer podría haber sido cualquier otro.

El aspecto visual de esta película es increíble aunque no sabría decir muy bien por qué. Es el toque del director, no sé que tiene, pero la imagen es absolutamente perfecta. No hablo de formatos de vídeo ni nada así, hablo de cómo está compuesta, hablo de la iluminación. Cada escena parece evocar algo concreto y si vas siguiendo atentamente las señales visuales la película se te va destripando sola, dándote una pista tras otra, marcándote el camino. No hay un plano que sobre o que llame la atención por algo malo, y esa es una de las cosas que caracterizan a un buen cine.

La música, como la imagen, acompaña a la acción como una compañera de viaje, me atrevería a decir que como Arthur a Cobb. Imagen y sonido en esta película son una combinación maravillosa aunque las dos separadas son también increíbles. De nuevo, Hans Zimmer nos recuerda que está ahí con esas músicas que te anuncian lo que va a pasar y te revuelven por dentro, que le aportan epicismo a tu vida durante dos horas. No mentiré diciendo que soy una experta en música, pero... si no estáis del todo convencidos de ver Origen, poneos la banda sonora.

Y bueno, no sé si se habrá notado por la exagerada longitud de la crítica pero se puede decir que Origen es una de mis películas favoritas. Es una película que hace que no importe cual sea tu género favorito o cual odies porque te puede gustar igual. Es una BUENA película, en mayúsculas, una muestra de buen cine, en mi opinión, y francamente no creo que termine nadie de verla pensando que ha tirado dos horas de su vida que podría haberlas pasado…¿durmiendo? Sería una gran ironía.

Cobb: ¿Cuál es el parásito más resistente?¿Una bacteria?¿Un virus?¿Una lombriz intestinal?(…) Una idea. Resistente. Muy contagiosa. Una vez que una idea se ha apoderado de cerebro es casi imposible erradicarla. Una idea totalmente formada y entendida se queda ahí aferrada.

Cobb: Los sueños nos parecen reales mientras los tenemos. Sólo cuando nos despertamos nos damos cuenta de que algo no cuadra.

Cobb: Hacía abajo es la única forma de ascender

Mal: Estás esperando un tren. Un tren que te llevará muy lejos. Sabes dónde quieres que ese tren te lleve pero no donde te va a llevar. Pero no importa, porque estaremos juntos.

Eames: No debes tener miedo de soñar a lo grande.

Antes me preocupaba mucho el tema paranoico este de si la vida es una ilusión, un programa de ordenador, un show de la televisión o alguna cosa así, pero ahora...solo quiero vivirla sea lo que sea. Además, si es un programa de televisión están haciendo un ejercicio de producción pésimo, ya podían traer a alguien famoso.

La decimoctava prueba es: Una imagen favorita de una catástrofe natural de cine.

La destrucción de Los Ángeles en El día de mañana es mi elección en este caso. Es mi película predilecta de catástrofes por lo que no podía ser de otra manera.